viernes, 29 de enero de 2010

Tercera llamada


Mañana tomo el avión. Llegó el momento, después de tantos meses de preparativos, de aventurarme en el nuevo continente, a miles de kilómetros de lo conocido, de mi zona de confort. Será un viaje largo: más de diez horas en avión y más de cinco en tren, para llegar a la que será mi nueva casa temporal.

Me siento muy segura por todo el apoyo que he recibido de mi familia y amigos. Me llevo sus palabras bonitas, sus consejos y sus buenos deseos (y hasta los amuletos de buena suerte que me dieron). Debo decir que redescubrí lo bien que se siente tener una familia que te aprecia y te respalda, y un montón de amigos que te echarán de menos pero que te recibirán con los brazos abiertos y con muchas ganas de volver a brindar contigo.

No me extrañen mucho, estaré muy bien, en un ratito regreso...

lunes, 18 de enero de 2010

Vivir en comunidad


Finalmente se resolvió el asunto de la vivienda, y de la mejor manera posible. Decidimos alquilar un piso entre siete jóvenes que estaremos por allá la misma temporada. Es un alivio tener asegurado un sitio a donde llegar, desde el primer día de nuestra estancia; además es una gran ventaja tener con quienes compartir los gastos generales. Pero siempre queda la reserva de ver cómo serán las relaciones en la casa, porque a pesar de que somos sociales por naturaleza, el género humano se caracteriza por encontrar conflictos hasta en los rincones.

Tengo grandes expectativas, espero que logremos mantener un ambiente agradable, a lo mejor terminamos volviéndonos íntimos amigos y nos recordamos toda la vida. Y si, por el contrario, todo va mal y apostamos por el drama cotidiano, vamos a parecer protagonistas de reality show, y ustedes, queridos lectores, van a tener la primicia de todo enfrentamiento.

Mientras llega el día (menos de dos semanas!) yo sigo con mi vida "guadalajarense": un poco de trabajo, fotos, pasarelas, y convivir mucho mucho con mis seres más queridos, por todo el tiempo que los tendré abandonados. Hasta mis papás se han puesto las pilas para aprender a chatear y mantenernos en contacto. Ah! cómo quiero a mis papases :)

jueves, 7 de enero de 2010

Insomnio


La ansiedad no me deja dormir, literalmente. Van tres noches seguidas en las que despierto y paso hasta un par de horas tratando de retomar el sueño. Y en todo ese tiempo, hago un repaso de todos los detalles imaginables en torno al viaje: dejar resueltos los pendientes, hacer las maletas con todo lo necesario, apegarme a las restricciones aeroportuarias, no perder el vuelo, encontrar piso, llevarme bien con mis compañeras de vivienda, adaptarme a la nueva universidad, comprar comida, conocer la ciudad, aprenderme la ciudad, socializar, llamar a mi casa, administrar mi dinero, combinar mi ropa, aguantar el frío, conseguir una bici, visitar los puntos de interés, ir a la playa, tomar muchas fotos, escribir en el blog... es lo que quiero hacer, pero en la noche todo se aparece al mismo tiempo, y se arremolina en mi mentecita y me mantiene despierta.

Me preocupa pensar que durante las veintitrés noches que me quedan antes de partir me suceda lo mismo, y que al llegar allá, además del desfase horario, vaya cargando con un montón de horas de sueño atrasado...

sábado, 2 de enero de 2010

Alguien quiere ir conmigo


Vaya que es pillo el gato. Creyó que podría escabullirse en el equipaje para ser mi compañero de viaje... pero no lo culpo, yo también lo voy a extrañar.

A veces pienso que debería existir una maleta grande grande grande, que no se llenara nunca, para poder llevar conmigo todo lo que quisiera.

Sí Diego, también a ti te llevaría en mi equipaje ♥